23 d’ag. 2011

Suerte

Suerte está distraída,
mirada perdida
al fondo de un pozo
sin pena ni gozo...

18 d’ag. 2011

Muñeco

Muñeca de cristal
de andar un poco triste,
nunca, jamás supiste
que yo era de metal.

Tan pálida e inquieta,
con lluvia me mirabas,
de lejos tú me amabas,
en la ventana, quieta.

Y chorros que caían
de sal detrás de ti,
y suerte para mí
que no te arrastrarían...

Más sal que de tu luz
salía como huyendo,
y lo que aún no entiendo:
¿por qué besar tu cruz?

Celoso del metal
la busqué en el espejo
colgada. En el reflejo
te vi, en el cristal.